En la lista de convocados que dio Maradona el viernes a la tarde, el nombre más llamativo que apareció fue el de Pablo Aimar. El actual enganche del Benfica de Portugal regresa a la Selección luego del sub campeonato obtenido en la Copa América de 2007 que se disputó en Venezuela.La convocatoria del Payaso tiene su por qué y ésto se debe a la clara ausencia de un enganche neto, que se cargue de la creatividad del juego y que desde sus pies nazcan las ocasiones de gol. Antes, este puesto era ocupado por Juan Román Riquelme, pero al no poder reconciliar la relación entre el 10 de Boca y Diego, éste último ha decidido intentar jugar sin un 10 clásico.
Se trató que Lionel Messi reemplazará a Riquelme a la hora de crear juego, pero ha quedado demostrado en reiteradas oportunidades, que la Pulga no siente esa posición, y por culpa de eso su desempeño baja considerablemente. La otra opción que intentó Maradona fue darle a Juan Sebastián Verón esta responsabilidad, pero el volante de Estudiantes de La Plata también tuvo sus inconvenientes para cumplir con creces lo que necesitaba el equipo, ya que hacía un desgaste físico inhumano por la necesidad de estar en contacto con la pelota durante todo el partido.
Con la vuelta de Aimar a la Selección, lo que intenta Maradona es poner las fichas en su lugar, o sea liberar a Messi de la responsabilidad de ser el creador de juego y dejar que el delantero del Barcelona esté solamente pendiente de recibir la pelota cerca del área para hacer pesar su gran habilidad, tal cual como juega en el club catalán. Además el otro que se sentirá más liberado será Verón, porque no tendrá que hacer el tremendo desgaste físico, y de esta manera se podrá aprovechar al máximo su gran calidad, como ocurre en el equipo pincharrata, porque la Bruja cuenta con la ayuda de Leandro Benítez y Enzo Pérez.Con esto no quiero decir que Aimar sea el salvador de Argentina, pero si el ex River cumple con creces su función, la Selección podría mejorar notablemente su rendimiento, y además tendrá una alternativa más a la hora de atacar, cosa que ha sido otro déficit de este equipo, ya que el conjunto nacional se ha vuelto muy predecible, porque se sabe que si de los pies de Messi no llega el gol, de otra forma sería muy difícil
La Selección está buscando esa luz al final del pasillo que parecía estar a punto de apagarse, pero por primera vez en los últimos meses se puede decir que Sudáfrica 2010 no está tan lejos de lo que nos imaginábamos.
Gastón Corti
No hay comentarios:
Publicar un comentario